viernes, 1 de octubre de 2010

DOMINGO XXVII DEL TIEMPO ORDINARIO

HACER LO QUE HAY QUE HACER
Desconcertante  la respuesta de Jesús ante la petición de los apóstoles que le piden más fe y como casi siempre, parece, da la impresión de que Jesús se sale por la tangente. Le piden fe y Él les dice que si la tuvieran serían capaces de hacer prodigios. Y luego va y les cuenta una pequeña parábola del amo y el criado poniéndoles en medio del tema, para que sean jueces: si ustedes tuvieran un criado ¿qué es lo que harían, como se comportarían con él? Lo lógico es lo que Él mismo les dice: el criado es  criado y el amo es amo.
Barrunto que lo que Jesús les trata de comunicar es que la fe en un don que el Padre da, que no se compra, ni se adquiere por méritos. Es gratuidad pura y a esa gratuidad se ha de responder en fidelidad, en lo de cada día, La fe no es para  presumir o hacer signos, prodigios o cosas  raras. La fe conlleva compromiso y en la medida en que ese compromiso se concrete, en esa medida, el corazón si se mueve y actúa desde el Padre, ira depositando su confianza en Él y eso es la fe: Fiarse, dejarse llevar, saber esperar,confiar total y absolutamente, pase lo que pase, aunque lluevan chuzos, pero sin dar la espalda a la vida y siendo conscientes de nuestra pobreza, porque al fin y a la postres "somos unos pobres siervos".
¡Feliz Domingo!

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