viernes, 22 de octubre de 2010

COMO AGUA FRESCA

Celebramos este domingo  24 de octubre el día del DOMUND: jornada que en toda la Iglesia se dedica a las misiones. El lema: "Queremos ver a Jesús".
Coincide con esta fecha  la celebración del Copatrono de nuestra Diócesis: San Antonio María Claret (1807-1870) que durante cierto tiempo (1848-1849) misionó en nuestras islas de Gran Canaria y  Lanzarote recorriendo pueblos en bestias o a pie, predicando la mayoría de las veces en plazas y sobre tarimas porque no cabían en las iglesias, confesando largas horas con una abnegación y entrega total que la gente percibía y que, a su manera, agradecía mostrándole cariño y respeto. El lo percibió y por eso dejo escrito en una carta lo que sigue:
 "Estos canarios me tienen robado el corazón... será para mí muy sensible el día en que los tendré que dejar para ir a misionar a otros lugares, según mi ministerio" (Carta al obispo de Vic, 27 de sept.).
Lo mismo que hoy, también en aquellos tiempos, la predicación de la Palabra de Dios se hizo necesaria: los hombres siguen queriendo ver a Jesús. Nuestra gente sintió esa necesidad y el Señor acudió con la predicación  y entrega del Padre Claret. Por eso es Copatrono de nuestra Diócesis.
Una feliz coincidencia  la que se produce este año y un acicate para nuestra Diócesis, pues lo mismo que entre nosotros fue vital la predicación del "Padrito", como le llamaban  nuestros antepasados, lo sigue siendo hoy para los pueblos del mundo.
El mandato de Jesús de anunciar la Buena Noticia es  llamada para toda la Iglesia; creo que entre nosotros la respuesta debe estar cargada de agradecimiento, pues gracias a la labor y entrega del Padre Claret  pudimos levantar cabeza en unos momentos muy difíciles en los que el Jansenismo hacia mella impidiendo encontrar el perdón gratuito y misericordioso del Padre.

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