viernes, 24 de septiembre de 2010

NI AUNQUE RESUCITE UN MUERTO

En este domingo XXVI del Tiempo Ordinario Jesús habla a los fariseos. No les dice nada nuevo porque lo que oyen ya lo han dicho los profetas por activa y por pasiva. La novedad está en que lo dice con  una parábola, intentando lograr que presten atención y que luego puedan rumiarla interiormente. Les invita deshacerse del ego-ísmo que alimenta sentimientos de superioridad respecto a los débiles, convencidos de que, en todo momento, deben estar a su servicio.
Le oímos decir a Epulón : "que Lázaro venga""que Lázaro valla". ¿Es que Lázaro no sirve para otra cosa, según la mentalidad de este hombre que no termina de entender por qué Lázaro sí y él no?
Si Lázaro, cuando estaba a tu puerta, no fue digno de que le ayudaras aunque sí que le conocías, porque ahora mismo lo estás reconociendo y diciendo su nombre ¿cómo es que ahora te fijas en él y quieres que te haga un favor, te preste un servicio?
El asunto va creciendo en intensidad y es al final cuando nos encontramos lo más duro. Los fariseos esperaban al Mesías para que empezara todo de nuevo y en este empezar -según sus esquemas- no tienen cabida estos que no son dignos de Dios porque son ladrones, impuros, pecadores... Son, piensan, los que están retrasando la llegada de esta novedad.
Jesús con esta parábola les dice a los fariseos que son tanto o más culpables que los otros, porque teniendo todo a su mano no son capaces de reconocer su pecado. Mientras no abandonen actitudes egoístas o prepotentes, dejen de manipular la Palabra de Dios; no anden pensando que la salvación les corresponde a ellos y a los que como ellos que piensan: nada de pobres, publicanos, pecadores, prostitutas, lisiados, cojos, mancos o enfermos, no será realidad la novedad de Dios. Jesús sin perder la paciencia se da cuenta de que estos no van a cambiar, lo cual  no le impide advertirles -porque quiere que  también se salven- cuando pone en boca de Abrahán  lo de : "si no escuchan a Moisés y a los profetas, no harán caso ni aunque resucite un muerto".
Felíz domingo.

No hay comentarios: