EL PATRON DE LOS POETAS EN LENGUA ESPAÑOLA

Si yo les digo que el patrón de los poetas de lengua española es Juan de Yepes Alvarez, seguro que más de uno se preguntará quién fue este señor, porque es que no se le conoce con ese nombre; si les digo que ese nombre pertenece a Fray Juan de Santo Matías, pues a lo mejor se acercan un poco, caliente, caliente; si les digo que les estoy hablando de San Juan de la Cruz, seguro que  ahora sí y seguro que también me podrán decir un montón de cosas de este santo carmelita reformador del Carmelo junto con Santa Teresa de Jesús. 

San Juan de la Cruz nació en Fontiveros -Avila-  un 24 de junio del año 1542 y murió en Úbeda -Jaén- un 14 de Diciembre del año 1591. Fue canonizado el 17 de diciembre de 1726 por Benedicto XIII. Es  venerado en la Iglesia Católica Romana, en la Iglesia Anglicana y en la Iglesia Luterana. Desde 1952 es patrono de los poetas en lengua española..
La poesía es para Fray Juan válvula de escape ante las complicaciones que van surgiendo en su vida a raiz de la reforma del Carmelo y que terminan con él en una cárcel de Toledo de donde en una noche oscura escapó con la ayuda del carcelero. Más tarde escribirá  lo de : "En una noche oscura con ansias de amores inflamada, ¡oh dichosa ventura!, salí sin ser notada, estando ya mi casa sosegada".  Poco a poco ha ido madurando el poeta enamorado que escribe y escribe clamando y buscando la sola unión con el Amado.
Está hablando de su vida, de lo que le mueve, de lo que vivencia día a día. No es simple poesía. Es escritura que responde a los deseos y ansias de su corazón.
Muchos no entendieron nada de esto -su experiencia mística- y le obligan a explicar lo que escribe, pero él sí que bien lo sabía. Su cántico espiritual es la expresión de la mística unión del alma con el amado y nos muestra  un hombre lleno de sensibilidad y de profundas ansias de entrega. Suyos son estos versos:

                             

"Mil gracias derramando
pasó por esto sotos con presura
y yéndolos mirando,
con sola su figura
vestidos los dejó de su hermosura."

"Noche oscura", "Cántico espiritual" y "Llama de amor viva" son sus obras clave junto con otros escritos.
Músicos como Federico Mompou, Amancio Prada o Carmelo Bernaola se han acercado a sus versos y les han puesto música, algunos de ellos con mucho acierto.
Descubrimos de la mano de San Juan de la Cruz cómo la poesía  puede ser un vehículo perfecto para  expresar y alabar a Dios, lo mismo que la música o cualquiera otra de las artes.