Como consecuencia de las fiestas de Pascua, en donde Dios se ha manifestado de forma especialicima y entrados ya en el tiempo ordinario, celebramos este domingo la fiesta de la Santísima Trinidad: aquello que aprendimos en el catecismo de un solo Dios verdadero y tres Personas distintas.
No vamos a entrar en ello en esta reflexión que hacemos pues sería trabajoso y terminaríamos por no entender nada que ya no haya sido dicho.
Estamos ante el misterio de la intimidad de Dios revelada por el mimos Jesús y aunque no
entendemos, si creemos. Misterio de amor y de comunión es el misterio de Dios que ha de llevarnos a reflexionar sobre nuestra vida de seguidores de Cristo.
Lo que debe preocuparnos no es tanto el escudriñar cómo es que siendo un Dios son tres personas, sino la relación con que se manifiesta y que es reflejo de su intimidad, de su misma esencia. Acercarnos a Dios debe ayudarnos a entendernos a nosotros mismos como hijos. Jesús hablando de este hondón de Dios no lo explica, lo revela y lo revela como amor en comunión, como misericordia y perdón, como creador y cuidador de la vida. Es ahí donde para nosotros, debe estar la clave de nuestra reflexión. Es ahí donde está la enseñanza y la invitación y en la medida que entremos en esta dimensión amorosa y nuestra vida vaya acercándose a ella, iremos atisbando este misterio de unidad por el que Jesús ruega al Padre para que en nosotros también sea una realidad. Mas fácil, en la medida en que estemos unidos a Jesús, ( permaneciendo en El, guardando su palabra) con todo nuestro ser y vida, en esa medida iremos comprendiendonos en Dios, que no comprendiéndole .
Todo lo que podemos saber de Dios ya nos ha sido dicho, ahora se trata de que nosotros acomodemos nuestra vida ( ardua tarea que sin su ayuda sería imposible) a los que nos ha sido dado conocer de su intimida.
Feliz día del Señor.
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