Hola, amigos, soy el párroco de Santa Clara en Zárate, Las Palmas de Gran Canaria, y en nombre de todos los que trabajamos en la parroquia quiero enviarles un saludo y darles la bienvenida a esta pagina nuestra en donde intentaremos comunicarnos e ir informando de todo el acontecer de nuestra parroquia. Que sean bienvenidos y un saludo.
sábado, 27 de marzo de 2010
DOMINGO DE RAMOS
Leeremos la Pasión del Señor según el evangelista San Lucas, pero no debemos olvidar las lecturas que le preceden.
La primera es de Isaías donde el hombre de Dios se afianza en la certeza de la fidelidad del que le ha invitado a empezar un camino que no va a ser fácil, pero del que saldrá victorioso, porque no le va a dejar en la estacada; dice textualmente: "...y sé que no quedaré avergonzado ".
La segunda lectura es de San Pablo a los de Filipos en donde recoge un himno que pone como modelo a Jesús en esto de ser fieles a la Palabra y la voluntad de nuestro Padre.
Ambas lecturas nos preparan para comprender mejor los momentos finales de la vida del Nazareno y, fundamentalmente, para que no perdamos de vista dónde encontraba la fuerza: fidelidad a la misión, perseverancia en la dificultad, oración ante la adversidad y sobre todo una confianza total y absoluta en el que le ha enviado.
Fidelidad, perseverancia, oración y confianza siguen siendo hoy las armas que tenemos y debemos usar aquellos que seguimos al Galileo resucitado, pues sabemos -y de sobra-, al par que experimentamos, que la misión, aunque da muchas alegrías, no es nada fácil, es árdua y requiere que nos forjemos en estas cualidades o virtudes que son las que nos ayudarán a hacer nuestro camino en medio de una sociedad que exige un testimonio más palpable e imbrincado con la vida de cada día. El Señor nos ayudará para no quedar confundidos o avergonzados.
¡Feliz Semana Santa!
PARA LEER
Título: Modelos de Dios (teología para una era ecológica)
Autora: Sallie Macfague
Editorial: Sal Terrae (Santander)
LUCES Y SOMBRAS
Es tiempo de oración, de temple y de confianza en lo que dijo Jesús: permanecerá para siempre. Pero es también tiempo de justicia , verdad y transparencia, aunque nos duela, pues sólo aceptando la verdad podremos curarnos.
UN CALVARIO QUE NO ACABA
En varias ocasiones he intentado ponerme en su lugar pero no soy capaz, creo que no lo seré nunca. El dolor de esta madre y su paciencia superan límites .
Desde aquí quiero enviarle mi apoyo total y que sepa que estamos con ella en todo momento, que su dolor queremos hacerlo -ya se que es imposible- nuestro.
Ella está dando, junto con toda su familia, un ejemplo de serenidad, entereza y paciencia que a todos nos conmueve y a mí, en particular, me edifica. Gracias Nieves, muchas gracias.
Noticias
Lo destaco porque hasta hace pocos años los fieles no se sen,tían atraídos por esta celebración, pero ya parece que sí. Y es que es muy importante para todos pues en esta Misa además de renovar los sacerdotes nuestro compromiso, el Señor Obispo bendecirá los santos óleos, que luego serán llevados a cada una de las parroquias para usarlos en la celebración de los sacramentos del Bautismo, la Confirmación y la Unción de Enfermos. Son signos de esperanza porque van a servir de consuelo o fortaleza, para todos aquellos que sean ungidos.
No debemos perdérnosla. Estamos, además, invitados.
sábado, 20 de marzo de 2010
V DOMINGO DE CUARESMA
En la primera lectura el profeta Isaías se encarga de recordarle al pueblo lo que el Señor-Yavé hizo por ellos cuando andaban por el desierto buscando una tierra, un lugar para vivir. Y es esta síntesis la que me obliga a zambullirme de lleno en el texto del Evangelio -San Juan- en donde Jesús levanta de la tierra A LA MUJER ACUSADA , DESTERRADA, SIN PATRIA, SIN MARIDO, OPRIMIDA Y HUMILLADA, invitándole a empezar de nuevo. Ha hacer su éxodo particular; ha salir de la situación en la que se encuentra. Y digo que el texto de Isaís me zambulle de lleno en este otro porque me parece que es una situación parecida: si el Señor- Yave, sacó al pueblo de la esclavitud y le protegió en su andadura, ahora es Jesús quien ayuda a esta mujer a romper sus cadenas y animarla a andar por el desierto en el que se ha convertido su vida, para poder alcanzar la plenitud como mujer: le ayuda y la empuja a ser mujer con toda dignidad, solamente con un breve diálogo: "Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más".
San Pablo en la segunda lectura, que es de la carta a los de Filipos, también habla de caminar, de alcanzar meta, de ganar premio. El también hubo de hacer su éxodo particular y si a la mujer del evangelio la levanto de la tierra a éste, a Pablo, lo tiró por tierra. Tanto el uno como la otra debían hacer su propia andadura.
También Jesús está haciendo la suya y ya se encuentra en la última etapa: Jerusalén, donde dará testimonio del Padre y el Padre lo hará también en su favor.
La Cuaresma es nuestro éxodo comunitario que nos debe llevar al particular, al propio, en donde seremos levantados de la tierra o tirados por los suelos; de forma metafórica, claro.Tanto lo uno como lo otro habla de la gracia de Dios que quiere ayudarnos a encontrarnos con nosotros. De la apuesta que sigue haciendo por cada uno. Y es que Dios sigue actuando la liberación. ¡¡No la dejemos escapar!!
¡Feliz Domingo!
Carta del Papa a los católicos irlandeses
¿También ustedes quieren dejarme ?
No se tata de acusar a nadie, no, porque en el fondo a todos nos toca algo de esta responsabilidad, unos más, otros menos. Lo cierto es que parece ser que en Australia un alto porcentaje de cristianos católicos se están planteando su pertenencia a la Iglesia. La autoestima como seguidores de Jesús ha sido tocada fuertemente y es necesario mirar de frente la situación, pedir al Señor que nos ilumine, reflexionar y seguir hacia adelante asumiendo la responsabilidad que nos toca con humildad y pensar que el Señor Jesús no nos abandonará. Es hora de rezar, reflexionar y pedir perdón.
sábado, 13 de marzo de 2010
19 DE MARZO
Tambien celebramos el día del Seminario, de nuestro Seminario. Quiera Dios que por la intercesión de San José, nuestros ruegos sean escuchados y el Señor nos regale algunas vocaciones.
IV DOMINGO DE CUARESMA
Me centro hoy en el Evangelio, en donde Jesús nos habla con una parábola: "El hijo pródigo". Corremos el peligro de quedarnos con la parábola en sí mirando la bondad del padre, las travesuras de hijo pequeño y la obstinación del mayor que exige derechos que no son suyos.
Yo creo que si nos preguntaramos porque Jesús cuenta esta parábola y a quien la cuenta, quizá la entendieramos mejor. Escribas y fariseos escandalizados porque se sienta a la mesa con pecadores y publicanos, porque éstos vienen a escucharle. Conclusión no puede venir de Dios éste que se reúne con pecadores sin ningún escrúpulo, transgrede la Ley, pensaban, y Jesús sabiéndolo les propone la parábola para que entiendan el porque de su actuar. No dice nada nuevo, pues eso ya lo decían los profetas y lo pedían con insistencia: la conversión, tanto de unos como de otros.
Es uno de los grandes signos que Jesús manifiesta para dar a entender que el Reino de Dios ha llegado: reunirse con pecadores, hablar con ellos y, sobre todo, sentarse a la mesa y eso es lo que escandaliza y lo que hará que busquen su desaparición, como hicieron con los profetas. Pero
Él no va a dejar de hacerlo, porque es que "PARA ESO HE VENIDO".
Bueno, se trata de que nosotros aprendamos la lección, pues habiendo sido dicho en aquel tiempo llega a nuestro hoy.
Nos queda mucho por andar.
¡Feliz Domingo!
UN DOLOR VIEJO
Me refiero a la madre de Sara y de Yeremi. Niños nuestros que no terminamos de saber dónde están, qué ha pasado con ellos, si viven o han fallecido.
Y mientras tanto, sus madres no paran.
Y yo les digo desde aquí, que no paren, no, que no paren y que sigan recordándonos que sus hijos no están en casa, que la habitación sigue igual que el último día.
Es tremendo lo que sucede pues resulta que desde casa podemos contactar con cualquier parte del mundo por medio de internet, que lo tenemos todo al alcance de la mano, los avances son espectaculares ¿y no somos capaces de saber dónde están estos niños?, ¿que les ha pasado?
Quiero compartir el dolor de estas madres. Quiero... que se sepa ya, de una vez , que fué lo que pasó y dónde están.
Me estremeció ver la foto que publicaba un diario en donde la madre de Sara, a pie de terreno, observa como las escavadoras mueven la tierra. ¡Dios mio, qué dolor! Y que fortaleza.
Por favor, no paren, sigan buscando, aunque haya que remover cielo y tierra. Y, sobre todo, no olvidemos. No dejemos a estas madres solas con su dolor.
sábado, 6 de marzo de 2010
TERCER DOMINGO DE CUARESMA
Empezamos este Domingo con el libro del Éxodo: Moisés en las tierras de Madián cuidando las cabras de su suegro Jetró en las laderas del monte Horeb.
Allí Dios por medio del fuego se le manifiesta y le invita a volver a Egipto porque ha escuchado el grito del pueblo en la esclavitud. EL QUE ES, le envía para ser su brazo fuerte que libre a los oprimidos. Hay dificultades, vaya que sí. Moisés se resite, pero termina accediendo y empieza algo nuevo. Los que clamaron a Dios reciben la respuesta en Moisés. Para los que esperaban la liberación no deja de ser un mensajero al cual le acompaña la ambivalencia y la limitación. Los que estaban en Egipto han de descubrir en este hombre la respuesta que Dios da a su grito. Así se inicia una nueva etapa en la historia de la salvación.
En la segunda lectura Pablo, escribiendo a los de Corinto, echa mano a los acontecimientos del Éxodo para hacerles caer en la cuenta de que Dios sigue actuando, lo mismito que hizo en otros tiempos con nuestros padres, pero es necesario que ellos sepan descubrir, en la situación que viven, la presencia de Dios, fortalecerse en ella. Les dice : "no protestéis como protestaron algunos de ellos, y perecieron a manos del exterminador". Termina la lectura con una frase: "el que se cree seguro, ¡cuidado no caiga!"
Ello me lleva a pensar que dentro de los problemas que se viven en esta comunidad tan movida por las tormentas, los que se mantienen firmes en las enseñanzas recibidas están corriendo el peligro de sentirse mejores y, por ello negarse a los que andan enredando. Quizá piensan que ya están salvados y que son mejores que los otros. De ahí la advertencia.
No se puede olvidar que lo del seguimiento de Cristo, nuevo Moisés, pasa por el corazón y que Dios perdona, siempre perdona y escucha.
El texto del Evangelio nos coloca a Jesús en la tesitura del castigo (aquí enlazamos con el Éxodo y con lo que a su vez Pablo dice a los de Corinto): no fueron castigados a morir de forma violenta o en un accidente por no ser religiosos. Las muertes sin sentido suceden y van a seguir sucediéndose y eso no es un castigo con el que Dios se venga por no querer saber nada de Él o no vivir como hijos suyos. El tema de la salvación no se dilucida por el tipo de muerte que nos acaezca, sino desde el corazón. Muramos como muramos nos suceda lo que nos suceda, Dios siempre acoge y perdona, siempre que el hombre le busque desde la sinceridad y confianza clamando a Él. La parábola de la higuera, con la que termina Jesús, pone las cosas en su sitio.
DIA DE LA MUJER TRABAJADORA

En estos días las mujeres son llamadas a manifestar sus reivindicaciones ante una sociedad que, por sistema, suele relegarlas a un segundo plano en todos los estamentos que la componen no sólo los socielaes, sino también los religiosos. No se trata aquí de romper una lanza en este día para quedar bien, (ya saben defenderse ellas muy bien) se trata más bien de mentalizarnos los hombres de que la mujer tiene derecho a que sea reconocida como parte integrante e importante de la sociedad. Se trata de lavarnos los ojos para poder ver que estamos haciendo y hacia donde debemos encaminarnos los hombres en este tema.
Nadie se confiesa, que yo sepa, machista, pero, -siempre hay un pero-, nuestras actitudes muchas veces dicen lo contrario.
DIA DEL SEMINARIO

Andamos ya preparándonos para celebrar el día del Seminario un año más. Y es ahí, en lo de un año más, donde veo el peligro de que pase por debajo de la cama y como cosa de los curas -y es verdad que es cosa de los curas-, pero también lo es de toda la Iglesia, de toda nuestra Iglesia que ha de preocuparse por pedir al Dueño de la míes obreros para sus campos.
No andamos en estos tiempos muy sobrados de vocaciones que digamos, somos más bien poquitos y mayores en nuestra Diócesis y por eso es que éste año nos dedicamos a la oración, a pedir al Señor que se acuerde de nuestra iglesia, que suscite vocaciones nuevas, y que guarde en los que ya andamos en ella para poder seguir anunciando el Evangelio.
Pero quiero insistir que esto no debe ser cosa de curas, sino de toda nuestra Diócesis. Hemos de tomar conciencia de nuestra realidad e invocar al Señor desde las carencias que estamos viviendo.